China: Viva "La Revolución de los Papeles Blancos"
Por La Marx International 30/11/22
Una movilización de masas atraviesa China, en protesta contra la dictadura del Partido Comunista de China (PCCh), y el gobierno de Xi Jinping. En los últimos días del mes de Noviembre miles de personas se movilizan en las principales ciudades del país como la capital Beijing, así como en Shanghái, Wuhan, Chengdu, Xinjiang, Tiantongyuan, Nanjing, Urumqi, Kasgar, Xi'an, Jinan, Chongqing, Haizhu, Dali, Changsha, y Zhengzhou, entre otras. Dada la magnitud continental de China, y el hecho de que la actual movilización abarca regiones tan distantes, queda evidenciado que estamos en presencia de un extraordinario levantamiento de masas, una verdadera revolución del pueblo contra la dictadura capitalista del PCCh.
La oleada revolucionaria global llega a China
El levantamiento comenzó 22 de Noviembre cuando los trabajadores de Foxconn, una corporación tecnológica que fabrica la mayor parte de los iPhone, iPad, PlayStation del mundo, salieron a luchar contra los engañosos contratos que los grandes empresarios quisieron imponer contra los obreros. La imposición de injustas restricciones contra el COVID, sumado a los engaños de los empresarios provocó el estallido de miles de obreros que salieron a enfrentarse con las fuerzas del orden, y de seguridad, incluidos agentes del equipo SWAT, dentro de la planta.
La insurrección obrera en Foxconn
Dos días después, miles de personas salieron a las calles de Urumqi, capital de la región autónoma uigur de Xinjiang, producto de un incendio que llevó a la muerte a 10 personas que no pudieron ser rescatadas por culpa de las restricciones del Covid. El comienzo de las protestas en Foxconn, y en Urumqi se extendió como reguero de pólvora por el resto de las ciudades de China para recordar a las víctimas del incendio y manifestarse contra las restricciones. Las protestas se extendieron desde la prestigiosa Universidad Tsinghua de Pekín, a las calles de Wuzhen, ciudad de la provincia oriental de Zhejiang, pasando por muchas de las ciudades más grandes de China.
Las protestas levantan consignas como Abajo Xi Jinping! Abajo el Partido Comunista!, consignas que son un hecho extraordinario que pone de relieve la decisión del pueblo chino de defender sus libertades contra la dictadura. Las movilizaciones han tomado por sorpresa al régimen que no está acostumbrado a ver movilizaciones con miles de personas luchando públicamente contra el gobierno, dada la falta total de libertades que impone desde hace décadas la dictadura capitalista del país.
Rápidamente, miles de jóvenes se pusieron al frente de las movilizaciones, como sucede en todas las revoluciones del siglo XXI. Y en este caso, durante las protestas los manifestantes cantaron el himno nacional chino, o cantan "La Internacional", haciendo particular énfasis en las estrofas de esas canciones que hablan de "levantarse contra la esclavitud", dando así mensaje directo al gobierno de la oligarquía capitalista. La movilización de masas que conmueve a China es parte de la oleada revolucionaria global contra el capitalismo que vivimos a partir del triunfo de las masas ucranianas en la batalla de Kiev en abril del 2022. Esta es la 3era oleada revolucionaria, y al igual que las dos anteriores, no respeta fronteras, lenguas, ni banderas.
La 3era oleada revolucionaria global en imágenes, de izquierda a derecha: Las masas toman el palacio de gobierno en Sri Lanka, Movilizaciones en Irán, los Partisanos armados en la revolución de Ucrania, oleada de huelgas en Inglaterra
Como parte de la oleada que ahora llega a China está en desarrollo la revolución que sacude Irán contra la dictadura de los Ayatolas, con más de 70 días de lucha, la oleada de huelgas obreras que sacude Europa, y los Estados Unidos, y también la revoluciones que se están llevando adelante en países como Haití, o Ucrania con el pueblo armado y miles de Partisanos, obreros, mujeres, y jóvenes derrotando al invasor. En todas estas revoluciones se destaca un importante activismo obrero, de las mujeres, de los pueblos originarios, de la comunidad LGTBQ, antirracista, de campesinos, y jóvenes, que está poniéndose al frente de la lucha.
Hong Kong y China son un solo proceso revolucionario
En la medida que las movilizaciones se fueron desarrollando, los jóvenes comenzaron a usar un estandarte y símbolo, un humilde trozo de papel en blanco. Miles de manifestantes se movilizan portando trozos de papel en blanco mostrándolos frente al gobierno, y las fuerzas represivas. Este objeto ha pasado a ser la representación de la lucha que están llevando adelante quienes encabezan las movilizaciones contra la dictadura. Los trozos de papel en mano llevado por los activistas ha hecho que llamemos a esta revolución "La Revolución de los Papeles Blancos". ¿Porque los activistas han elegido este símbolo de protesta? Esta clase de formas de protesta tiene sus raíces en el proceso revolucionario que atravesó Hong Kong entre los años 2014, y 2020, en las que los activistas sostenían papeles en blanco para protestar contra las nuevas leyes antidemocráticas de seguridad nacional que imponía el gobierno de Carrie Lam, que a su vez responde a la dictadura del PCCh.
China: La Revolución de los "Papeles Blancos"
La dictadura impuso leyes en Hong Kong para acallar las protestas que se iniciaron a partir de "La Revolución de los Paraguas del 2014" frente a lo cual el gobierno de Carrie Lam, en complicidad con el PCCh, impuso una legislación para extraditar a China a los activistas que se opusieran con la llamada Fugitive Offenders and Mutual Legal Assistance in Criminal Matters Legislation (FOMLACML). Surgió entonces la modalidad de mantener el papel en alto después de que las autoridades prohibieran los eslóganes y las frases asociadas al movimiento de protesta, argumentando que el gesto no es solo una declaración sobre el silenciamiento de la disidencia, sino también un desafío a las autoridades, como si dijera: "¿vas a arrestarme por sostener un cartel que no dice nada?".
También con la hoja en blanco los activistas en Hong Kong querían "representar todo lo que queremos decir pero no podemos". La Revolución en Hong Kong tuvo varios hitos: Primero las movilizaciones del 2014 durante la 1era oleada revolucionaria mundial que coincidieron con eventos como la Revolución en Siria, la Revolución de Rojava, o el comienzo de la Revolución en Ucrania con el "EuroMaidán". Como parte de esa oleada revolucionaria, venía desarrollándose y alcanzó su pico máximo durante el 2014 el levantamiento de la minoría iugur, de aproximadamente 24 millones de personas en la provincia de Xinjiang, que fue brutalmente aplastada por el régimen de PCCh, declarándolos "terroristas".
El pueblo de Hong Kong retomó su revolucióncontra la FOMLACML, entre los años 2019, y 2010, que coincidió con la oleada de huelgas obreras en Cantón, China continental, en reclamo de mejoras a las condiciones de trabajo. Todo este proceso de movilización y lucha, tanto del pueblo iugur, como del pueblo de Hong Kong, así como de los trabajadores y el pueblo que se movilizan en China continental, demuestran que la lucha de los pueblos de Hong Kong y China, son un mismo proceso revolucionario. La oligarquía del PCCh ha atacado con brutalidad a la luchas de las minoría iugur, y ha establecido campos de concentración con casi 2 millones de personas de esa etnia, que son denunciados internacionalmente. En Hong Kong, miles de activistas fueron apresados, y extraditados para extinguir la llama de la revolución.
Para poder sofocar la lucha, la oligarquía encabezada por Xi Jinping contó con la inestimable colaboración del imperialismo de Estados Unidos. Muchos honestos activistas de Hong Kong creían que EE.UU iba a apoyarlos, y portaban banderas de EE.UU en las movilizaciones. Engañados por patrañas como la "Teoría del Desacople" muchos activistas de Hong Kong creyeron EE.UU y China están enfrentados, y entonces su lucha iba a ser apoyada por el imperialismo norteamericano.
Es el mismo fraude que les venden a muchos activistas cubanos en su lucha contra la dictadura capitalista de Cuba. Pero cuando la represión del PCCH y su régimen arreciaron contra ellos, el imperialismo de EE.UU que dispone de miles de herramientas políticas, y económicas para actuar, no movió un dedo en defensa de los activistas, y se limitó a algunas "mociones de protestas", en los organismos internacionales como la ONU, y otros.
Movilizaciones en Hong Kong
Una demostración de que la "Teoría del Desacople" es falsa, y de que cuando se trata de la revolución, los gobiernos capitalistas más allá de sus roces y disputas ocasionales se unen para derrotar las luchas de los trabajadores y el pueblo. En este caso la "acción" de la dictadura de Xi Jinping, unida a la "omisión" del imperialismo de EE.UU, hizo posible que esas revoluciones fueran parcialmente sofocadas. Así, la oligarquía del PCCh y Xi Jinping pudieron sofocar los focos revolucionarios que estallaban desde el 2014 hasta hoy entre las minorías, y nacionalidades oprimidas.
Y cuando creían tener "todo resuelto", Xi-Jinping consideró que debía consolidar su dictadura convocando el XX Congreso del PCCh para establecer su reelección por 3era vez, y transformarse en un "verdadero monarca" el primer líder del PCCh en estar en el cargo por más de 10 años en la historia de China. Mientras tanto, por otro lado, Putin consideró que había llegado el momento también de consolidar su dictadura, y aplastar la revolución en Ucrania, por lo cual invadió la nación ucraniana en febrero del 2022.
Pero los planes de los dictadores se toparon con la revolución mundial: Entre marzo, y abril el pueblo ucraniano derrotó a las tropas de Putin en la batalla de Kiev, lo cual detonó una oleada revolucionaria global que comenzó con multitudinarias movilizaciones en todo el mundo de apoyo a los trabajadores y el pueblo de Ucrania, huelgas generales, y gremios de los "pesos pesados" del proletariado en Inglaterra, Francia, Alemania, y demás países de Europa, movilización de los obreros norteamericanos, el estallido de revoluciones en Irán, y Haití.
Era cuestión de tiempo que la 3era oleada entrara en China. Y para sorpresa de Xi Jinping, la revolución de China, y Hong Kong que él creía sepultada para siempre, volvió a estallarle en la cara, esta vez con millones movilizados en todas las ciudades de China continental, con miles de jóvenes agitando los "Papeles Blancos".
La "Revolución de los Papeles Blancos" contra la "monarquía" de Xi
En agosto del 2022 sesionó el XX Congreso del PCCh que aprobó el denominado "Plan Integrado de Cinco Esferas", junto a la "Estrategia Integral de Cuatro Puntas". Toda la charlatanería de las "puntas" y "esferas" se redujo a una sola cuestión: La entronización de Xi Jinping casi como una monarquía absoluta, superando a Mao Tse Tung, y todos los anteriores presidentes de China con más tiempo en el poder. Éste era el verdadero objetivo del XX Congreso del PCCh, mostrar una dictadura "monolítica", sin fisuras, ni cuestionamientos.
Era tal la necesidad de los oligarcas de hacer ostentación de su status de semi- monarcas en el XX Congreso del PCCh, que expulsaron públicamente al ex presidente del país Hu Jintao durante el período 2003-2013 en plena sesión, a la vista de todos los medios de prensa del mundo. Las imágenes del anciano, retirado por los empleados de seguridad contra su voluntad, fue una verdadera puesta en escena de los oligarcas dispuestos a mostrarse frente a los medios de comunicación, para enviar un mensaje al mundo de que son monarcas absolutos, una "dictadura sólida".
Hu Jintao es "invitado a retirarse" del XX Congreso del PCCh, frente a todas las camaras del mundo
Tras el XX Congreso la dictadura capitalista del PCCh endureció las restricciones contra el Covid, pero no como manera de enfrentar la pandemia, sino como modo de reprimir más brutalmente a la población, con toda clase de restricciones. Hemos denunciado las brutales "cuarentenas capitalistas" que no buscan proteger al pueblo, sino reprimirlo. Los stalinistas, los campistas, la izquierda revisionista, los charlatanes a sueldo del imperialismo como Noam Chomsky, volvieron a hablar de la "China imperialista", que se prepara para destruir a Estados Unidos en la "Tercera Guerra Mundial". Insisten en la "Teoría del Desacople" de que China se "desacopla" de EE.UU para cuestionar su hegemonía. Pero es todo lo contrario.
En el XX Congreso del PCCh la dictadura no se mostró como una "monarquía" para enfrentar a Estados Unidos, sino para mostrarle a Wall Street, y a Estados Unidos que ellos no han perdido la capacidad de garantizar las inversiones, los intereses de las grandes Corporaciones imperialistas, y que van a seguir super- explotando a pueblo chino bajo el látigo de la represión. China no es un país imperialista. Es una submetrópli del capital imperialista, una gran factoría del imperialismo norteamericano, y mundial donde concurren los grandes capitales del mundo para sacar provecho de la alta tasa de explotación de la clase obrera.
Sin ir más lejos, Foxconn la gran empresa de tecnología donde explotaron las movilizaciones es propiedad en un 66% del imperialismo japonés, y el resto son capitales taiwaneses. Precisamente hace unos meses Nancy Pelosi, la presidenta del Parlamento de EE.UU estuvo en un viaje del cual se reveló que su hijo es dueño de China Mobile, una de las más grandes empresas de telefonía. Todas las empresas chinas, incluidas las "estatales" tienen participación privada con "dueños" chinos y de Corporaciones Imperialistas que participan en las bolsas de Wall Street, y Hong Kong. Y ahora las empresas de China que operan en Wall Street son auditadas directamente por Wall Street, con lo cual China ha perdido todo rasgo de "independencia" respecto del imperialismo mundial.
Pero además China es una "bomba" de tiempo a punto de explotar en la medida en que la "burbuja" inmobiliaria de China alcanzó ya mas de 30 billones de dólares, y amenaza con la quiebra de toda su banca expresada en la crisis del gigante chino inmobiliario Evergrande. La crisis de China no termina allí, es una "bomba" de hambre, pobreza y miseria, con miles de millones que no tienen para comer o donde vivir. China es una "bomba" de superexplotación, ataques a la clase obrera, y alarmantes índices de la tasa de suicidios en las fábricas. En la submetrópoli los oligarcas atacan los derechos humanos con esclavitud y opresión a los pueblos originarios, y campos de concentración de millones de personas de la minoría iugur, en las cuales invierten empresas textiles de Estados Unidos. Los oligarcas no pueden controlar el COVID- 19, mientras surgen nuevas cepas, y nuevos cierres y cuarentenas en sus ciudades. La submetrópoli China es una "bomba" ambiental, en Shangai no se puede respirar, uno de los países más contaminados del mundo del cielo al mar, con miles de kilómetros cuadrados de costas, estuarios, bahías, pantanos, arrecifes y lechos de algas marinas destrídos por construcción de represas y los intentos por ganarle tierra al mar, el uso de petróleo, pesticidas, y niveles de plomo 50% superiores a lo normal.
Xi Jinping y los oligarcas del PCCh son, al igual que Putin, capataces y matones del imperialismo que se ensucian las manos todos los días para garantizar las ganancias de Wall Street. No están enfrentados, ni "desacoplados" al imperialismo, sino que están muy "acoplados" como sus socios menores. Pero para garantizar la alta tasa de explotación de las Corporaciones Globales, Xi y su grupo de matones del PCCh debe eliminar todos los derechos de las masas, deben suprimir el derecho a protesta, a reunión, a manifestación, a organización independiente del estado, a sindicalización independiente, a los derechos de las minorías, para que los obreros no tenga el derecho a reclamar, ni luchar contra las injustas condiciones de vida y trabajo que el capitalismo les impone. De éste modo Xi Jinping, garantiza la concurrencia de los capitales imperialistas a China.
Los partidos del imperialismo de EE.UU se presentan como "adalides de los derechos humanos" hacen algunas denuncias de forma, como para no desilusionar a sus votantes, y hacen las respectivas "pantomimas" de enfrentamiento entre China y EE.UU, que hacen las delicias de los stalinistas, y campistas.
Pero luego, tanto los funcionarios imperialistas, como sus matones del PCCh celebran cumbres, en las cuales tanto los criminales del Wall Street, como los criminales de los regímenes de China o Rusia, se reúnen. Ya sea en el G20, en la "Cumbre del cambio Climático", o en Davos, en medio hermosos paisajes, jefes y matones toman grandes litros de alcohol, y disfrutan de los placeres, mientras comparten negocios, y ganancias, sin "desacople" a la vista.
Pero la alegría de los matones del PCCh les duró poco. Apenas dos meses después de terminadas las sesiones del XX Congreso del PCCh, de haber echado a patadas a Hu Jintao frente a las cámaras, y de proclamar la eterna monarquía de Xi Jinping, la "Revolución de los Papeles Blancos" les estalla en la cara. La 3era oleda revolucionaria mundial no respeta fronteras, ni "Congresos monárquicos" poniendo al borde del tacho de basura a las "puntas" y "esferas".
Viva la "Revolución de los Papeles Blancos", todo el apoyo al pueblo de China
Ahora ha llegado el momento de apoyar con todas nuestras fuerzas a los trabajadores y el pueblo de China. Su revolución es fundamental para terminar con la dictadura china, que es un pilar fundamental del capitalismo global. La dictadura ha sentido el impacto de la "Revolución de los Papeles Blancos" anunciando el levantamiento de restricciones por el Covid. Pero la lucha debe seguir hasta terminar de una vez con todas con los oligarcas del PCCh, y el gobierno siniestro de Xi Jinping. Los papeles blancos han mostrado que la lucha del pueblo de China y Hong Kong es una sola! Es el momento de terminar con la dictadura de estos matones al servicio del imperialismo, y el capitalismo mundial.
Nuestro grito es uno solo: Viva la lucha de los trabajadores y el pueblo de China! Libertad a los presos políticos! Abajo las leyes de Carrie Lam en Hong Kong! Libertad a los presos iugures, desmantelamiento inmediato de los campos de concentración! Abajo el PCCh, Abajo Xi Jinping! Por un gobierno obrero y popular de los trabajadores, los jóvenes y campesinos de China y Hong Kong! Viva la "Revolución de los Papeles Blancos"!