El pasado 2 de junio se realizaron las elecciones presidenciales, al mismo tiempo se definieron 128 senadurías y 500 diputaciones federales, teniendo una lista nominal de poco más de 99 millones de electores, Morena ganó con casi 36 millones de votos ( es decir, el 36.53% de la lista nominal de electores), la coalición PAN-PRD-PRI obtuvo 16 millones y medio de votos (16.75%), mientras que Movimiento Ciudadano tan solo obtuvo 6 millones de votos (6.30%).
El dato mas impactante de la elección es que poco más de 40 millones de personas se abstuvieron de ir a votar, mientras que 1 millón 400 mil votaron nulo, de conjunto, 41 millones 852 mil personas (más del 42 %) no votaron por ningún candidato, y rechazaron todas las candidaturas capitalistas que aparecieron en la boleta electoral.
Los resultados reflejan un crecimiento del rechazo de la población a las candidaturas defensoras del sistema capitalista. Comparando los datos de esta elección con las elecciones presidenciales del 2018 donde participó el 63% de la lista nominal de electores, la participación en el 2024 descendió al 57%, demostrando que casi la mitad de la población no apoyó ni votó por ninguna de las coaliciones capitalistas que se presentaron.